Quiero cambiar mi vida, ayudado por la Psicologia Budista.
22/07/08 20:06
Nuestro amigo Jorge nos
escribe impulsado por una necesidad de "cambiar de vida". Siente
que la Psicología Budista puede ayudarle. Y eso es lo que podemos
decirle por el momento.
Querido Jorge,
Ante todo... muchas gracias por visitarnos y por participar en la búsqueda, de una mejor forma de vivir. Te aseguro que todos estamos en la misma Rueda de Vida.
Me imagino que cuando menos habrás leído algo de los artículos contenidos en la Web, que se dedican a la filosofía Budista, o conoces lo suficiente para poder desear incorporarla a tu alma.
Hay tanto escrito!.
La historia del Buey ilustra de una forma muy gráfica, y misteriosa, simbólica, el camino. Y cómo puedes observar, existe un hilo conductor para entender cómo Buda intentaba ayudar a sus hermanos para salir del terrible embrollo de la no-consciencia.
El simple deseo, de anhelar cambiar de estilo de vida tiene una enorme cantidad de fuerza. Ahora bien... es importante definir... o mejor subrayar que es aquello de tu vida que no te hace feliz.... que es lo que te causa el sufrimiento... si hay una especie de desajuste entre lo que te imaginas que pudiera ser tu vida, y la realidad de tu experimentación diaria.
La luz que ilumina el camino del Buda... que es todo aquel ser que está iluminado.. es la Luz de la Consciencia. Y fijaté... esa luz no tiene que ver con la luz de la inteligencia intelectual, nuestras funciones de desarrollo sino una luz que ilumina a todas las funciones.
Tu ser... mi ser... el ser de todos los humanos se desarrolla psíquicamente, en cuatro funciones
.
Una de ellas es la intelectual.
Todos la conocemos... nos hace pensar, idear, elaborar imágenes crear nuestros mundos, incluyendo la idea del Yo personal.. al que le ponemos o le ponen nuestros padres, el nombre y el apellido.
Otra es la emocional,
Sabemos que prosperamos en la vida, porque sentimos emociones, y junto con el intelecto albergamos sentimientos. La mayor parte de las veces son un tormento y un éxtasis. Y no pueden ser controladas por el intelecto, pero sí reconocidas, y dirigidas..
Tenemos la función corporal sensorial... nuestros sentidos nos hacen introducir el Universo dentro del alma. Y creamos una maravilla de mundo en el interior, en el que nos movemos de forma absolutamente individual, de la misma manera que nadie posee el mismo código genético que nosotros. Somos únicos. Eso nos parece bastarnos, porque el cuerpo físico, genéticamente se desarrolla para que la especie prospere... y ese plano corporal a veces de desdibuja, ya que esa imagen intelectual-emocional que tenemos de nosotros mismos no lo atiende cómo es debido. Entonces creemos que el cuerpo es una cosa... y el espíritu... o la inteligencia otra. Lo alienamos... o convertimos en un ser que creemos controlar.
Además tenemos miedo ..... miedo al dolor, al cambio, a la muerte. Lo enterramos... nos hace sufrir... o gozar.
Y luego está algo tan importante cómo la función sexual-creativa.
Aquella que nos ayuda , cómo a ti, a necesitar cambiar de vida, nos ofrece la intuición ... la maravillosa inteligencia de la intuición, que nos hace salir del Yo cotidiano, para emprender un nuevo camino, la mayor parte de las veces contando con la participación de la Vida en toda su extensión, los hombres, las mujeres, nos hace entender la maravillosa acción creativa del Universo, pero desde nuestra alma individual. Y con todo lo aprendido... con todo lo que el cuerpo-mente-espíritu conoce... se realizan milagros. La unión entre seres humanos, de la que la sexualidad es la más conocida es un núcleo creativo de una enorme capacidad.
Junta todas esas funciones y ahí se crearán múltiples milagros.
Qué te sucede?
Porqué sientes emergencia para cambiar?
Reconoces que alguna función de tu ser te es desconocida.... o está subdesarrollada?
Hay algo importante.
Quizás pueda parecer paradójico. Cuando tu alma se revuelve....y necesita cambiar, a pesar de la presión que ejerce.... de la sensación de emergencia, de prisa, de ansia... lo más importante es quedarse quieto.
Si. Empieza por quedarte quieto... elimina de tu vida lo que te hace agitarte, o busca momentos en los que puedas quedarte quieto. Los trabajos a veces causan mucha zozobra. Nos desgastan.... nos muelen el alma. Y eso es porque nos sentimos insatisfechos. Quédate quieto y escucha tu cuerpo. Escucha cómo cruje, cómo se lamenta, cómo se desasosiega. No quieras huir de la sensación, sino que siente que eso es una emoción pasajera, que te tiene preso. Un calor sofocante que requiere quietud. Eso que te duele.... necesita ser mirado con afecto. Desarrollar la compasión que nos une a cada ser humano. Y mirarnos por dentro con amor que nada pide.
Hay algo o alguien o tú mismo que te juzga?
Quien te juzga?
Crees que tú existes separado del ser que escribe y dice..."quiero cambiar"
No hay nada que cambiar. Porque en el instante que la consciencia mira de verdad... el alma y la vida comienzan a seguir su curso adecuado.
Y créeme. El Yo que juzga se desvanece.
Vale. Quietud y consciencia.
Perseverancia...... si quieres mira el artículo de "La Doma del Buey".
Lo sé es muy simbólico. Si hay algo que no entiendes nos lo escribes.
Esta carta es para decirte, que te escuchamos. Que todos andamos en el mismo camino. Nos podemos saludar... pero cada uno solo puede pisar sus propias huellas.
Cómo ejercicio práctico... casi un juego, puedes hacer una cosa.
Toma dos hojas en blanco.
En una de ellas, puedes escribir todas las cosas que según tú, piensas que son negativas en tu forma de vivir. Hazlo de manera espontánea, sino juzgarlas, sin pensar que lo haces para enseñar a alguien.
Y en la otra... escribe todas las cosas que sientas que te gustaría llegar a sentir, actualizar, pueden ser cosas físicas, objetos sentimientos, lo que sea.
Bien... las que piensas que te sobran no están para ser despreciadas. Son las maestras. Cómo el fuego nos enseña con dolor, que no podemos agarrarlo con las manos. No estamos para eso. Ese listado es para que seas consciente de lo que te duele.
Y el otro es la fuerza de tu alma, que ya posee las virtudes... las cualidades que anhelas. Cuando nos quemamos, sabemos que soplando, con la cualidad de la respiración se nos calma el ardor.
Intenta sentir y apoyarte en aquellas cualidades que buscas. para que se hagan conscientes. Sopla sobre tu quemazón....pero eso sí..
tratando de buscar cada día... unos ratitos de Silencio.
Y respirar en Silencio.
Esperamos que nuestras palabras te hayan servido de ayuda.
Si tienes alguna duda, nos vuelves a escribir.
Un cariñoso saludo.
Rosa y Miguel
Querido Jorge,
Ante todo... muchas gracias por visitarnos y por participar en la búsqueda, de una mejor forma de vivir. Te aseguro que todos estamos en la misma Rueda de Vida.
Me imagino que cuando menos habrás leído algo de los artículos contenidos en la Web, que se dedican a la filosofía Budista, o conoces lo suficiente para poder desear incorporarla a tu alma.
Hay tanto escrito!.
La historia del Buey ilustra de una forma muy gráfica, y misteriosa, simbólica, el camino. Y cómo puedes observar, existe un hilo conductor para entender cómo Buda intentaba ayudar a sus hermanos para salir del terrible embrollo de la no-consciencia.
El simple deseo, de anhelar cambiar de estilo de vida tiene una enorme cantidad de fuerza. Ahora bien... es importante definir... o mejor subrayar que es aquello de tu vida que no te hace feliz.... que es lo que te causa el sufrimiento... si hay una especie de desajuste entre lo que te imaginas que pudiera ser tu vida, y la realidad de tu experimentación diaria.
La luz que ilumina el camino del Buda... que es todo aquel ser que está iluminado.. es la Luz de la Consciencia. Y fijaté... esa luz no tiene que ver con la luz de la inteligencia intelectual, nuestras funciones de desarrollo sino una luz que ilumina a todas las funciones.
Tu ser... mi ser... el ser de todos los humanos se desarrolla psíquicamente, en cuatro funciones
.
Una de ellas es la intelectual.
Todos la conocemos... nos hace pensar, idear, elaborar imágenes crear nuestros mundos, incluyendo la idea del Yo personal.. al que le ponemos o le ponen nuestros padres, el nombre y el apellido.
Otra es la emocional,
Sabemos que prosperamos en la vida, porque sentimos emociones, y junto con el intelecto albergamos sentimientos. La mayor parte de las veces son un tormento y un éxtasis. Y no pueden ser controladas por el intelecto, pero sí reconocidas, y dirigidas..
Tenemos la función corporal sensorial... nuestros sentidos nos hacen introducir el Universo dentro del alma. Y creamos una maravilla de mundo en el interior, en el que nos movemos de forma absolutamente individual, de la misma manera que nadie posee el mismo código genético que nosotros. Somos únicos. Eso nos parece bastarnos, porque el cuerpo físico, genéticamente se desarrolla para que la especie prospere... y ese plano corporal a veces de desdibuja, ya que esa imagen intelectual-emocional que tenemos de nosotros mismos no lo atiende cómo es debido. Entonces creemos que el cuerpo es una cosa... y el espíritu... o la inteligencia otra. Lo alienamos... o convertimos en un ser que creemos controlar.
Además tenemos miedo ..... miedo al dolor, al cambio, a la muerte. Lo enterramos... nos hace sufrir... o gozar.
Y luego está algo tan importante cómo la función sexual-creativa.
Aquella que nos ayuda , cómo a ti, a necesitar cambiar de vida, nos ofrece la intuición ... la maravillosa inteligencia de la intuición, que nos hace salir del Yo cotidiano, para emprender un nuevo camino, la mayor parte de las veces contando con la participación de la Vida en toda su extensión, los hombres, las mujeres, nos hace entender la maravillosa acción creativa del Universo, pero desde nuestra alma individual. Y con todo lo aprendido... con todo lo que el cuerpo-mente-espíritu conoce... se realizan milagros. La unión entre seres humanos, de la que la sexualidad es la más conocida es un núcleo creativo de una enorme capacidad.
Junta todas esas funciones y ahí se crearán múltiples milagros.
Qué te sucede?
Porqué sientes emergencia para cambiar?
Reconoces que alguna función de tu ser te es desconocida.... o está subdesarrollada?
Hay algo importante.
Quizás pueda parecer paradójico. Cuando tu alma se revuelve....y necesita cambiar, a pesar de la presión que ejerce.... de la sensación de emergencia, de prisa, de ansia... lo más importante es quedarse quieto.
Si. Empieza por quedarte quieto... elimina de tu vida lo que te hace agitarte, o busca momentos en los que puedas quedarte quieto. Los trabajos a veces causan mucha zozobra. Nos desgastan.... nos muelen el alma. Y eso es porque nos sentimos insatisfechos. Quédate quieto y escucha tu cuerpo. Escucha cómo cruje, cómo se lamenta, cómo se desasosiega. No quieras huir de la sensación, sino que siente que eso es una emoción pasajera, que te tiene preso. Un calor sofocante que requiere quietud. Eso que te duele.... necesita ser mirado con afecto. Desarrollar la compasión que nos une a cada ser humano. Y mirarnos por dentro con amor que nada pide.
Hay algo o alguien o tú mismo que te juzga?
Quien te juzga?
Crees que tú existes separado del ser que escribe y dice..."quiero cambiar"
No hay nada que cambiar. Porque en el instante que la consciencia mira de verdad... el alma y la vida comienzan a seguir su curso adecuado.
Y créeme. El Yo que juzga se desvanece.
Vale. Quietud y consciencia.
Perseverancia...... si quieres mira el artículo de "La Doma del Buey".
Lo sé es muy simbólico. Si hay algo que no entiendes nos lo escribes.
Esta carta es para decirte, que te escuchamos. Que todos andamos en el mismo camino. Nos podemos saludar... pero cada uno solo puede pisar sus propias huellas.
Cómo ejercicio práctico... casi un juego, puedes hacer una cosa.
Toma dos hojas en blanco.
En una de ellas, puedes escribir todas las cosas que según tú, piensas que son negativas en tu forma de vivir. Hazlo de manera espontánea, sino juzgarlas, sin pensar que lo haces para enseñar a alguien.
Y en la otra... escribe todas las cosas que sientas que te gustaría llegar a sentir, actualizar, pueden ser cosas físicas, objetos sentimientos, lo que sea.
Bien... las que piensas que te sobran no están para ser despreciadas. Son las maestras. Cómo el fuego nos enseña con dolor, que no podemos agarrarlo con las manos. No estamos para eso. Ese listado es para que seas consciente de lo que te duele.
Y el otro es la fuerza de tu alma, que ya posee las virtudes... las cualidades que anhelas. Cuando nos quemamos, sabemos que soplando, con la cualidad de la respiración se nos calma el ardor.
Intenta sentir y apoyarte en aquellas cualidades que buscas. para que se hagan conscientes. Sopla sobre tu quemazón....pero eso sí..
tratando de buscar cada día... unos ratitos de Silencio.
Y respirar en Silencio.
Esperamos que nuestras palabras te hayan servido de ayuda.
Si tienes alguna duda, nos vuelves a escribir.
Un cariñoso saludo.
Rosa y Miguel